En Gran Canaria siempre encontrará algo que hacer. No sólo es Las Palmas, sino que otros municipios de la isla, como Agüimes, Arucas, Gáldar, Telde y Teror también gozan de activísimos calendarios culturales. Gran Canaria es una isla orgullosa de su historia y a la que le gusta lucir su enorme cantidad de museos.
Los residentes de esta isla son una gente culta a la que le gusta ir con regularidad al ballet, a un concierto de música clásica o al teatro. Pero aún así, el deporte continúa siendo la mayor de sus aficiones. Aunque el fútbol es aquí objeto de auténtica devoción, la práctica de otros deportes como el baloncesto, el tenis, el surf o el voleibol también está muy extendida.
Las actividades deportivas también están en consonancia con otra de las mayores atracciones de Gran Canaria: sus envidiables playas. Las horas que pase tostándose al sol se pueden combinar con pasatiempos más activos como el windsurfing, el esquí acuático, las motos acuáticas, la navegación a vela o la pesca de altura. Los paseos en barco dan la posibilidad de explorar las costas desde el mar y gran parte de las playas ofrecen servicios de alquiler de barcas a pedal o bananas como formas más relajadas de diversión.
La variedad de las playas grancanarias es tan grande que puede satisfacer a todos los gustos, con lo que merece la pena explorarlas. Los que busquen un toque de sofisticación y de lujo han de ir sin duda al complejo de la Playa de Meloneras. Ubicado tras las deslumbrantes Dunas de Maspalomas, este complejo de primera categoría está convirtiéndose en el nuevo centro neurálgico de moda en la isla. Los elegantes y llamativos turistas que pasean por la avenida junto al mar suelen detenerse para solazarse tomando una copa en cualquiera de los bares al aire libre o para adquirir prendas o perfumes de marca a precios reducidos en las exclusivas tiendas que se encuentran de camino. Los casinos y los campos de golf de 18 hoyos también esperan a que el visitante perspicaz los descubra en este nuevo oasis bajo el sol.
Las afamadas Playa del Inglés y de Maspalomas tienen kilómetros de dunas y aguas tranquilas y transparentes en medio de animados complejos, que ofrecen una gran gama de servicios, además de múltiples formas de ocio nocturno. Puerto Rico, con su bahía al amparo de las olas, y el antiguo y pintoresco pueblo pesquero de Mogán son también lugares conocidos por sus playas. Más aún, una tarde en la playa urbana de Las Canteras, en la capital de la isla, siempre es una estupenda opción como paréntesis entre las compras y las visitas, dándole la oportunidad de comprobar su destreza como nadador si intenta llegar a la Barra de arrecifes en marea baja.
Las visitas turísticas al norte y centro de Gran Canaria también le harán descubrir muchos tesoros escondidos. Las impresionantes cuevas del Cenobio de Valerón en la Cuesta de Silva son antiguos silos de grano excavados en la roca volcánica por los primeros habitantes de las islas. La Cueva Pintada de Gáldar es un importante sitio arqueológico donde habitaban las familias aborígenes y que ahora se ha transformado en un museo que exhibe los numerosos restos encontrados en la zona.
El paisaje grancanario merece la pena ser descubierto. La Caldera de Bandama, en el interior de Las Palmas de Gran Canaria, es un impresionante cráter volcánico de un kilómetro de ancho y 200 metros de profundidad. El mirador que se encuentra en lo alto posee unas hermosas vistas, desde donde se observa el primer campo de golf de España, situado junto al mismo cráter. Si se interna más aún en la isla, hacia las cumbres centrales, descubrirá lo versátil que es esta pequeña isla, con sus pintorescos pueblos agrícolas y sus barrancos ricos en vegetación, que contrastan con las áridas y secas dunas que ha dejado en el sur.
Los parques temáticos no escasean en Gran Canaria y a los niños les encantará visitar el Parque Acuático Aqualand en Maspalomas o el Sioux City, un pueblo del antiguo oeste, donde encontrarán duelos de vaqueros, peleas de salón y sheriffs galopando detrás de bandidos, todo para recrear los días del salvaje oeste. Asimismo, toda la familia podrá disfrutar de Los Palmitos Park en Maspalomas, hogar de un sinfín de variedades de aves exóticas y que cuenta con el único show de delfines de la isla.
A pesar de su tamaño, este “continente en miniatura”, como se le ha dado en llamar, le garantiza que siempre le quedará algo que ver y que hacer en esta versátil isla bajo el sol.
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