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En Tenerife no hay tiempo para aburrirse, a menos que usted quiera. La capital, Santa Cruz de Tenerife, presume de un calendario repleto de eventos, junto con otras ciudades y municipios de la isla, entre ellos La Orotava, Los Realejos, Puerto de la Cruz y La Laguna.
El tiempo nunca se detiene en Tenerife, a menos que así lo quiera. La capital, Santa Cruz de Tenerife, presume de un calendario repleto de eventos junto con otras ciudades y pueblos de la isla, como La Orotava, Los Realejos, Puerto de la Cruz y La Laguna.
El imponente Teide es el pico más alto de toda España (3718 m.), el tercer volcán más grande del mundo y un destacado icono natural de las Islas Canarias. Puede viajar a su cima en teleférico o pedir un permiso y realizar un impresionante paseo en las alturas. El único paisaje lunar, compuesto de formaciones de lava y los vapores de azufre, son algo obligatorio, junto con las extraordinarias vistas del mar de nubes.
Situado alrededor del volcán inactivo, el Parque Nacional del Teide fue declarado espacio protegido y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La destacada diversidad ecológica es resultado de los variados microclimas que crean hábitats para muchas especies autóctonas. No olvide sus botas de senderismo, ya que los incontables caminos le llevarán por terrenos únicos, entre los que verá áridos desiertos, frondosos bosques de pinos y unas zonas naturales casi vírgenes.
Las aguas transparentes y cálidas de la costa tinerfeña rebosan una rica vida marina y son un buen destino para hacer submarinismo durante todo el año, con muchos centros y lugares para alojar a principiantes y profesionales. El increíble clima de Tenerife y los vientos del interior también la hacen ideal para deportes acuáticos como el surf, el windsurf o la vela. Los viajeros más intrépidos pueden también realizar parapente, kite-surf y escalada.
El exuberante Carnaval es el evento más destacado del calendario cultural tinerfeño. Esta fiesta de la calle que se celebra anualmente, con sus fastuosos espectáculos de disfraces y música, es uno de los mayores del mundo. Tradicionalmente, el Carnaval estaba considerado como la última oportunidad de fiestas y excesos antes del comienzo de la Cuaresma, pero se ha transformado hoy en día en un fogoso evento comunal.
Las festividades comienzan en la capital, Santa Cruz, pero muchas ciudades y pueblos viven sus propias fiestas. Tras meses de preparación, las celebraciones empiezan con una exuberante cabalgata, donde se dan cita espectaculares carrozas, la contagiosa música samba y alegres comparsas. Miles de personas disfrutan unidos a la alegría, a unos vestidos ostentosos, brillantes y escasos de tela, a los elaborados peinados y coloridos disfraces. La algarabía y las actuaciones continúan a lo largo de varios días, en los que no para la música y la diversión. Los festejos concluyen con la estrafalaria procesión del Entierro de la Sardina y con un magnífico despliegue de fuegos artificiales el último fin de semana. El Carnaval de Santa Cruz es un jolgorio, casi una bacanal, que no debe perderse.
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