Cuándo visitar el Duero

Si viaja al Duero para disfrutar del paisaje, la cultura, los vinos y la gastronomía, cada una de las estaciones del año tiene su interés y encanto especiales. No obstante, hay algunas fechas y períodos que le permitirán sacar el máximo provecho de su visita.

El 1 de enero la mayoría de tiendas están cerradas y el transporte público opera bajo horarios reducidos. Enero es un mes especialmente tranquilo, una vez pasadas las vacaciones de Navidad y las celebraciones de la Noche de Fin de Año.

El Carnaval, en febrero, en el que se utilizan disfraces extravagantes y se siguen antiguas tradiciones, y cuya celebración varía de población a  población, puede resultar realmente divertido. En las localidades de mayor población el Carnaval puede llevarse a cabo de manera más ordenada y mediante una procesión de figuras enmascaradas, mientras que en algunos pueblos esta tradición todavía refleja su origen pagano y pre-romano en el que se celebraba el final del invierno y el inicio de la primavera.

El Viernes Santo y el Domingo de Pascua, que pueden celebrarse en cualquier fecha entre finales de marzo y de abril, son días festivos en los que todavía es posible ver la figura del cura de cada parroquia y sus feligreses viajando por la región con una figura de Jesucristo para que los fieles salgan a su paso para besarla.

Los días festivos son el 25 de abril, que es el Día de la Libertad; el 1 de mayo, que es el Día de los Trabajadores; Corpus Christi, que se celebra 60 días después del Domingo de Pascua; y el 10 de junio, que es el Día Nacional.

El 15 de agosto también es día festivo y es la fecha en que se celebra la Asunción de la Virgen María. Aproximadamente un mes más tarde, la celebración de la vendimia suele ser una de las épocas con más actividad del año para los habitantes de la región del Duero. Los amantes de la elaboración del vino lo encontrarán fascinante e incluso podrán participar en la fiesta. ¿Se imagina poder contar en casa que usted también fue en parte responsable de la cosecha del vino de ese año?

El mes de agosto y principios de septiembre es el período con mayor actividad en la región del Duero. Especialmente en localidades de mayor población, como Régua, podrá ver un gran número de inmigrantes que regresan a la región en lo que se ha convertido en una “peregrinación” anual. La mayor parte de los festivales de la zona, como por ejemplo el festival de Lamego, a principios de septiembre, suelen celebrarse en esta época del año, que es cuando los bares y restaurantes realmente hacen el agosto. Muchos viajeros que visitan la región disfrutan también de este animado ambiente. No obstante, tenga en cuenta que ésta es, en su mayor parte, una modesta zona rural, y que si visita las partes más remotas de la misma a duras penas notará las celebraciones.

El Día de la República, que también es jornada festiva, se celebra el 5 de octubre, mientras que el día de Todos los Santos es el 1 de noviembre. En diciembre hay dos días festivos, el Día de la Restauración de la Independencia y el Día de la Inmaculada concepción, que se celebran los días 1 y 8 respectivamente.

La mayoría de la tiendas permanecen cerradas el día previo a la Nochebuena, es decir el 24 de diciembre, así como el mismo día de Navidad. Este período es una de las mejores épocas del año para visitar la región y disfrutar de unas Navidades más tradicionales y menos comercializadas. La Nochevieja es una noche de celebraciones, aunque suelen ser tranquilas, y la mayor parte de la gente prefiere disfrutarlas en compañía de familiares y amigos.

La mayoría de las personas que viajan hasta el Duero suele hacerlo en coche, lo que es especialmente cómodo si lo que desea es desplazarse por el interior de la región y visitar sus bodegas. No obstante, si no tiene planeando viajar mucho por la zona, el tren desde Oporto puede ser una opción interesante, ya que éste viaja directamente a Pocinho, cerca de la frontera con España. Algunos kilómetros después de haber salido de Oporto, el tren empieza a reseguir el curso del Río Duero, ofreciéndole 100 kilómetros seguidos de paisajes realmente espectaculares. También hay excursiones periódicas en barco por el Duero, que puede aprovechar bien como excursión o incluso para desplazarse hasta su destino mientras disfruta del paisaje. Y, por si esto no fuera suficiente, también tiene la opción de viajar hasta esta región en helicóptero desde Oporto.

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