Torre de Belém

Uno de los monumentos más singulares de Lisboa, la Torre de Belém, es una torre fortificada del siglo XVI, construida como puerta de entrada simbólica a Lisboa y que conmemora la expedición de Vasco da Gama a la India. Esta construcción, casi perfecta y excesivamente ornamentada, también forma parte de un sistema de defensa utilizado para la protección de Lisboa, que consiste en una línea de fortines existente desde Cascais y Caparica. Para entrar en la torre debe cruzarse un puente levadizo de madera de estilo manuelino pero con influencias del arte decorativo morisco.

Cuando Lisboa fue invadida por las tropas españolas en 1580, la torre cayó en manos del Duque de Alba español y fue utilizada como prisión. La Torre de Belém puede dividirse básicamente en dos partes: un bastión hexagonal que contiene 17 cañones de gran calibre y de carga en la recámara y una torre de cinco plantas de 35 metros con estatuas de San Vicente y de San Miguel, así como una fascinante capilla templaria en el interior. Catalogada como monumento de la UNESCO, la torre fue elegida por los portugueses en el 2007 como una de las Siete Maravillas de Portugal.